Seguidores

viernes, 21 de mayo de 2010

noche de esas..


Hay noches en las que me despierto sobresaltada. Noto al corazón latir con prisa y no encuentro la manera de hacer que vaya más lento. Nunca recuerdo el sueño, nunca sé porqué me despierto sudando y muerta de miedo. Entonces me levanto de la cama, me asomo a la ventana, y me quedo un rato con los ojos bien abiertos observando a la ciudad dormida. Me mantengo ahí, inmóvil, viendo todo lo que por la mañana no se ve, sólo porque me da miedo volver a la cama, sólo porque me da miedo volver a soñar con no sé muy bien qué, sólo porque me da miedo volver a levantarme sobresaltada. Se ve tan muerta la ciudad, se ve tan sola que yo a veces te imagino en tu lado del mundo -que no es mi lado del mundo- asomado a la ventana, con tu corazón con prisas y el cuerpo sudado y angustiado por soñar con no sé muy bien qué, hasta que casi amanece y volvemos a la cama -tú a tu cama y yo a mi cama-, y me duermo tranquila porque por un mísero momento te sentí en casa, te sentí en mis rodillas, te sentí compartiendo mi miedo que nunca fue tu miedo, mi noche que muy pocas veces fue tu noche. Supongo que es algo pasajero. Supongo que algún día se acabarán esas noches de miedo y miedo, en las que te echo de menos y me cuesta conciliar el sueño.