Seguidores

domingo, 7 de noviembre de 2010


Hago de cuenta que nada sucede pero la verdad es que, estoy hecha mierda y no lo digo para presumir, lo estoy. Creo si algo quiero es salir, emborracharme y no saber nada de mi vida. Quisiera dejar de respirar. Quisiera que alguien se quedase, que dejen de irse. Es desesperante ver como la gente me usa y no puedo detenerlos. Es desesperante verme, desde afuera, muriendo de dolor. Me siento tan sola que sólo puedo pensar en cosas malas, en hacerme daño, en vomitar o dejar de comer. Me acompaño de más vacíos y siento volver, esas ideas suicidas (para muchos locas) que por lo menos me daban un motivo. Por lo menos, la idea me acompañaba. Voy a desaparecer, y no por la anorexia y la bulimia, voy a desaparecer porque la gente vive mientras que yo muero en vida. Ellos siguen y yo me quedo atrás, tan atrás que me da vértigo y caigo, siento que caigo y nadie me ve. Les resulta tan natural dar por hecho que dejando de comer o comiendo, algo malo haré y en vez de intentar salvarme, o de encontrar algo en mí, se van. No quiero ser la victimaria ni la víctima, pero es imposible pedir amor donde no queda nada. Ya les da igual. Y si a mi también me da igual ¿que mierda hago esperando?. Es tiempo de terminar. Es tiempo de despedidas.

No hay comentarios:

Publicar un comentario